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Su obra expone un continuo transitar por el recuerdo, un ejercicio íntimo que permite a la autora regresar a los espacios que conformaron su personalidad, y que también le sirven de impulso para continuar el viaje de la vida a través de los diversos lugares a los que la conduce su propia trayectoria literaria.
Elsa López nace en Guinea Ecuatorial en 1943. Tras doctorarse en Filosofía en 1980 con la tesis El tablado de la Montañeta. Estructura social y cultural de una comunidad campesina en la Isla de la Palma, merecedora de Cum Laude, adquiere la Cátedra. Entre los numerosos cargos que ha ocupado en su trayectoria como agente cultural destacan: Presidenta de la Sección de Literatura del Ateneo de Madrid (1987-88), organizadora y miembro del grupo artístico “La Ortiga”, y directora de la Fundación Antonio Gala para Jóvenes Creadores (2002-2006). Asimismo, de su labor en Canarias sobresalen la fundación de “La Casa de Jorós” (Centro de Arte Popular, La Palma, 1993), el diseño y la coordinación para el Gobierno de Canarias de los proyectos “El Papel de Canarias” (Madrid, 1993) y “Memoria de las Islas” (Canarias, 1994-2000), y el cargo de Presidenta del Ateneo de La Laguna (2011-2013). En 1989 funda Ediciones La Palma, que dirige desde entonces, y más recientemente, Promoción Cero, una empresa dedicada a la difusión de la literatura y el arte de jóvenes creadores.
En lo referido a la investigación, ha centrado sus estudios en temas antropológicos como las supersticiones, la medicina popular, la arquitectura y el mundo rural. Ha recibido el I Premio de Investigación José Pérez Vidal (1993). Distintas instituciones públicas y gubernamentales han contado con Elsa López para el desarrollo de diversos proyectos de divulgación cultural, como “España canta” (1990), “Buscando España” (1991) y “Canarias en Europa” (Sociedad para la Promoción Cultural de Canarias, 2010).
Por otra parte, también ha trabajado en el mundo del cine escribiendo los guiones Morir sin campanas, Quijote de Oro en el Primer Premio de Cine de Alcalá de Henares (1975); Poema para el tiempo (1976); y De topo en topo, mención honorífica de la Cámara de Comercio de Las Palmas de Gran Canaria (1977). Igualmente, es autora de los guiones televisivos Canarias Mágica: Trece guiones sobre la historia, los mitos y las supersticiones en el archipiélago canario (1987), El recodo del sol (1988) y La isla de La Palma (1992).
El centro de su producción literaria está formado por una quincena de poemarios que, desde 1973, año en que publica El viento y las adelfas, constituye una de las trayectorias poéticas más sólidas, con proyección nacional e internacional, con títulos como Del amor imperfecto (Premio Internacional de Poesía Ciudad de Melilla, 1987), La Fajana Oscura (Premio Internacional de Poesía Rosa de Damasco, 1989) y Mar de amores (XII Premio Nacional de Poesía José Hierro, 2001). En 2003, la prestigiosa editorial Hiperión publica toda la poesía de Elsa López escrita hasta la fecha en el volumen A mar abierto (Poesía 1973-2003), prologado por el Premio Príncipe de Asturias Pablo García Baena. De su obra posterior, cabe destacar Travesía (XIII Premio de Poesía Ciudad de Córdoba “Ricardo Molina” 2005) y Ofertorio (2008). Además de figurar en numerosísimas antologías y publicaciones colectivas nacionales e internacionales de diversa índole, sus poemas han sido traducidos a los idiomas árabe, francés, inglés, italiano, neerlandés y portugués.
Preocupada también por explorar otros ámbitos literarios, Elsa López ha publicado tres novelas: El corazón de los pájaros, aparecida en 2001 tras ser una de las diez obras seleccionadas para el Premio Planeta; Las brujas de la isla del viento (2006) y Una gasa delante de mis ojos (2011). Completan su trayectoria narrativa las monografías Diego Hidalgo. Memoria de un tiempo difícil (1986) y José Pérez Vidal: entrevistas sobre su vida (junto a Antonio Cea y con prólogo de Julio Caro Baroja, 1987).
Colaboradora en prensa y en revistas nacionales e internacionales, la autora ha recibido diversas distinciones, como la de miembro correspondiente de la Real Academia de Córdoba de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes, Embajadora de Buena Voluntad de la Reserva de La Biosfera Isla de La Palma ante la UNESCO y el Almendro de las Artes y las Letras (2008), otorgado por el Colectivo Artes y Letras.
En la segunda mitad del siglo veinte, emerge la figura de Elsa López como una de las escritoras más constantes, cuya voz, una de las más profundas y emocionantes del panorama nacional, se centra en temas como la nostalgia por el paisaje de la isla, el territorio de la infancia y un continuo transitar por el recuerdo.
Su primera novela, El corazón de los pájaros, ofrece el itinerario de una mujer que comparte importantes datos autobiográficos con la autora, como el lugar de nacimiento, de crianza y de residencia. Se trata de la historia de amor que se produce entre la protagonista y un hombre más joven que ella en la isla de La Palma. La novela es un recorrido por esa relación amorosa y por la vida de ella.
Las brujas de la isla del viento, indudablemente nutrida por sus investigaciones en el terreno de la antropología, mezcla el misterio de un asesinato con las supersticiones populares, haciéndose eco de la tradición oral.
Una gasa delante de mis ojos supone un potente ejercicio de mimetización con la poeta argentina Alfonsina Storni. Elsa López se centra en las últimas horas de vida de Alfonsina antes de su suicidio, en un largo monólogo en el que repasa su vida y se despide de todas las personas a las que ama, lo cual supone un desgaste emocional enorme y requiere de una actitud especial para afrontar la escritura de una novela tan desgarradora.
En cuanto a su obra poética, esta nace de la observación de la poeta en un rincón de la ciudad, del puerto o de la casa, evocando recuerdos y situaciones a través del paisaje que se transforman en poema. La sencillez aparente de sus composiciones recoge una emoción latente que se mantiene en calma y, no obstante, mantiene la fuerza expresiva de la sentencia, como si cada poema fuera una confesión íntima y profunda. Sentimientos como la pena, la soledad, la pérdida, la pasión y el amor son constantes, y vienen de la mano de un conjunto de imágenes que surgen del paisaje -casi siempre con reminiscencia isleña- (el mar, el viento, los barcos, los pájaros, las almendras…) y de temas asociados al sentimiento, como el cuerpo amado, la herida que todavía palpita en la memoria, o la muerte ligada al amor, la pena o la derrota.
I. LITERATURA
II. ESTUDIOS ANTROPOLÓGICOS: